Como mencioné en el "Día 2" de éste blog, el "convoy" había quedado en la ciudad de Mercedes... Lo que nunca mencioné fue dónde ni con quién. Acá es donde aparece Eduardo O. y su familia. Que puedo decir... me encontraba en una situación delicada: tenía que volver a Capital Federal, sin saber a donde ir, con el riesgo que implica volver con "el convoy", y lo dificultoso que seria encontrar un lugar para guardarlo; fue entonces que a través de una amiga, vine a dar con Eduardo...
que realmente me supo sacar de un gran apuro y junto con su familia me trataron como si yo fuera uno mas de ellos; no solamente me ofrecieron lugar para guardar mi equipo, sino que también me hicieron un lugar en su mesa, en su casa y en su vida en cierta forma... compartí muy gratos momentos con todos ellos, Eduardo, su esposa Lujan, y sus hijas Laura y Sofia. Realmente quede sorprendido con este encuentro, son personas excepcionales, que no solamente tuvieron la mejor de las predisposiciones para ayudarme, sino que me hicieron sentir uno mas de su familia, y sinceramente, los voy a recordar hasta el ultimo de mis días!
Solo tengo palabras de gratitud hacia ellos, y creo que fue la única vez en la que me costo tanto trabajo retomar la ruta, estaba tan pero tan a gusto que me dolió mucho despedirme para continuar... pero es como tenia que ser... No hay palabras que puedan devolver lo que ellos me dieron!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario